Sillero 1887

Nuestra historia

La zapatería Sillero tiene una historia fascinante que se remonta a sus modestos comienzos en 1887. La pequeña tienda de zapatos comenzó como un negocio familiar en una calle tranquila de la ciudad. Con su habilidad excepcional para trabajar con cuero y su dedicación al oficio, Sillero rápidamente ganó una reputación por la calidad y durabilidad de sus zapatos.

Con el paso de las décadas, la zapatería Sillero se destacó en la comunidad local, convirtiéndose en un destino popular para aquellos que buscaban calzado de alta calidad, hecho a mano con cuidado y atención al detalle.

Con el tiempo, la empresa expandió sus operaciones, modernizándose sin perder su esencia artesanal. A medida que surgían nuevas tecnologías y tendencias, la zapatería Sillero se adaptaba, manteniéndose relevante y competitiva en el mercado. A lo largo de las generaciones, la familia Sillero transmitió no solo sus habilidades artesanales, sino también sus valores de integridad, excelencia y compromiso con el cliente.

Hoy, cuatro generaciones después de su fundación, la zapatería Sillero sigue siendo una presencia destacada en el panorama comercial, orgullosa de sus raíces y del legado dejado por sus fundadores. Con una clientela fiel y una reputación establecida de excelencia, la empresa mira hacia el futuro con optimismo, sabiendo que su tradición de calidad perdurará por muchas generaciones más.

La zapatería Sillero tiene una historia fascinante que se remonta a sus modestos comienzos en 1887. La pequeña tienda de zapatos comenzó como un negocio familiar en una calle tranquila de la ciudad. Con su habilidad excepcional para trabajar con cuero y su dedicación al oficio, Sillero rápidamente ganó una reputación por la calidad y durabilidad de sus zapatos.

Con el paso de las décadas, la zapatería Sillero se destacó en la comunidad local, convirtiéndose en un destino popular para aquellos que buscaban calzado de alta calidad, hecho a mano con cuidado y atención al detalle.

Con el tiempo, la empresa expandió sus operaciones, modernizándose sin perder

su esencia artesanal. A medida que surgían nuevas tecnologías y tendencias, la zapatería Sillero se adaptaba, manteniéndose relevante y competitiva en el mercado. A lo largo de las generaciones, la familia Sillero transmitió no solo sus habilidades artesanales, sino también sus valores de integridad, excelencia y compromiso con el cliente.

Hoy, cuatro generaciones después de su fundación, la zapatería Sillero sigue siendo una presencia destacada en el panorama comercial, orgullosa de sus raíces y del legado dejado por sus fundadores. Con una clientela fiel y una reputación establecida de excelencia, la empresa mira hacia el futuro con optimismo, sabiendo que su tradición de calidad perdurará por muchas generaciones más.